El plazo de ejecución de los trabajos es de un total de 13 meses y estos suponen preparar la llegada del AVE a la ciudad y ordenar el tráfico rodado
Las obras de soterramiento del paso a nivel de El Puche han comenzado. En el día de ayer, varios operarios con sus martillos hidráulicos, camiones o máquinas excavadoras desarrollaban los primeros trabajos en la llamada ‘zona cero’. Un tramo de 1.150 metros de longitud sobre la cartografía de la ciudad en el que se actúa concretamente entre el Sector 20 y las inmediaciones del paso superior de la vía Níjar-Los Molinos.
La ejecución tiene un plazo de 13 meses y su objetivo es cumplir dos propósitos fundamentales. Por un lado poner en marcha la primera obra de integración del ferrocarril de la línea de Alta Velocidad en la ciudad de Almería, con todo lo que ello implica. Y por otro lado, la eliminación de un paso a nivel que en pleno siglo XXI aún se mantenía en mitad de una intersección urbana comprometiendo la circulación entre los barrios de El Puche y Los Molinos.
Las obras se han iniciado en varios puntos cercanos al famoso cruce de caminos de forma simultánea. Ayer se vieron máquinas moviendo tierras en la zona verde que discurre junto de la calle Isla de Cabrera y paralela al Sector 20. También, camiones hacían labores de desescombro en la pastilla de suelo que se extiende desde la citada calle hasta la avenida de Torrecárdenas. Y ahí se seguirán las próximas semanas. El presupuesto de esta obra es superior a 15 millones de euros, precio por el que se adjudicó el pasado mes de abril a Comsa.
Desde entonces, el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Almería, institución que asume parte del coste de estos trabajos, había reclamado por activa y por pasiva el inicio de unas obras que tuvieron que ser pospuestas como consecuencia del cambio de partidos al frente del Ejecutivo estatal. Y es que había prisa. Esta importante actuación va a provocar un corte en el tráfico ferroviario de la capital por diez meses. De ahí que estén desarrollándose en paralelo unas actuaciones de reforma de la que será la nueva estación de referencia de la provincia, la de Huércal-Viator.
Esta obra se inició en el mes de julio y estará lista justo a tiempo de que se desvíen los trenes, medida que es inevitable y que se tomó por la sociedad Almería Alta Velocidad al entender que era la mejor solución posible para librar los inconvenientes aparejados a la obra, que no son pocos.
La intervención ya en marcha plantea el soterramiento de las vías del tren, supresión del paso a nivel incluida, en una longitud total de 165 metros. Sobre este tramo se implantará una gran rotonda de 80 metros de diámetro exterior que favorecerá la permeabilidad de una zona que se quitará de encima los problemas de tráfico. La glorieta será la que permita la conexión de la actual red viaria urbana en el entorno del paso a nivel.
Los viales a los que dará desahogo son media docena, entre los barrios de El Puche y Los Molinos: la avenida de la Tolerancia, avenida del Mare Nostrum, calle Isla Cabrera, calle Rosa Chacel, Carrera del Mamí y calle de Mariana Pineda, continuidad de la carretera de Sierra Alhamilla.
SERGIO GONZÁLEZ HUESO
Fuente y fotografía: ideal