Un ex interventor de la empresa TBA que tenía la concesión del ferrocarril Sarmiento cuando ocurrió la llamada Tragedia de Once que provocó 51 muertos y centenares de heridos, afirmó hoy en el juicio oral y público que la seguridad en ese medio de transporte «estaba garantizada».
En su declaración testimonial, el ingeniero Raúl Baridó recordó que fue designado interventor de la empresa seis días después del siniestro del 22 de febrero de 2012, y desempeñó esa función durante tres meses.
Baridó admitió que, cuando asumió el cargo, los trenes de esa línea tenían un «deterioro operativo», pero aclaró que no ponía en riesgo la seguridad de los pasajeros.
«Las condiciones de seguridad estaban garantizadas», dijo el testigo ante el Tribunal Oral Federal Dos (TOF 2), a cargo del debate oral y público que se realiza en los tribunales de Comodoro Py 2002 de la Ciudad de Buenos Aires.
Los trenes «no salían si la seguridad no estaba garantizada», insistió y justificó su afirmación con los «informes técnicos» que proporcionaban quienes revisaban las formaciones.
Por el siniestro fueron procesados y se hallan sometidos a juicio los ex secretarios de Transporte de la Nación Juan Pablo Schiavi y Ricardo Jaime, los empresarios Claudio, Roque y Mario Cirigliano y el maquinista Marcos Córdoba.
También están enjuiciados Marcelo Alberto Calderón, Carlo Michele Ferrari, Carlos Lluch, Sergio Daniel Tempone, Jorge Álvarez, Guillermo Alberto D’Abenigno, Jorge Alberto de los Reyes, Alejandro Rubén Lopardo, Carlos Esteban Pont Vergés, Daniel Fernando Rubio, Víctor Eduardo Astrella y Oscar Gariboglio.
La lista de procesados se completa con Pedro Roque Rainieri, Francisco Pafumi, José Doce Portas, Antonio Guillermo Luna, Pedro Ochoa Romero, Laura Aída Ballestero, Antonio Marcelo Suárez, Miguel Werba, Daniel Guido Lodola, Luis Ninoná y Antonio Eduardo Sícaro.
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