La plataforma Talgo 230 ha recibido la homologación técnica de la Agencia Europea de Ferrocarriles (ERA) y la Agencia Federal Ferroviaria de Alemania (EBA), habilitando su operación comercial bajo la denominación ICE L por parte de Deutsche Bahn. Esta certificación también permite su futura explotación en territorio danés por Danske Statsbaner bajo servicios EuroCity.
El proceso de certificación ferroviaria culmina un proyecto iniciado en 2019 con dos contratos: Deutsche Bahn adquirió 23 unidades con opción de ampliación hasta 100 trenes, mientras que Danske Statsbaner contrató inicialmente 8 composiciones, posteriormente expandidas a 16. Todas las unidades han sido desarrolladas y fabricadas en instalaciones españolas.
Los trenes de alta velocidad Talgo 230 incorporan la tecnología de rodadura exclusiva del fabricante español, alcanzando velocidades comerciales de hasta 230 km/h. Su diseño ligero y alta capacidad optimiza las operaciones en redes ferroviarias con alta densidad de paradas, característica de los sistemas europeos continentales.
La Agencia Europea de Ferrocarriles y el regulador alemán EBA autorizan la plataforma española para servicios de alta velocidad con Deutsche Bahn y futuras operaciones en Dinamarca.
La interoperabilidad ferroviaria constituye un elemento clave del proyecto. Los trenes están certificados en configuraciones modulares desde 9 hasta 21 coches, adaptándose a diferentes demandas de pasajeros según rutas y temporadas. Próximamente obtendrán autorización adicional para circular en Austria, Países Bajos y la estación fronteriza de Basilea en Suiza.
La implementación técnica se desarrollará por fases. Inicialmente, las composiciones circularán con locomotoras fabricadas por terceros, mientras que posteriormente incorporarán la tracción Br 105 de Talgo, actualmente en proceso de homologación independiente tras su presentación en Innotrans 2024.
El proceso de certificación, desarrollado junto a TÜV SÜD Rail desde 2021, incluyó seis fases de evaluación. Tras pruebas estáticas en España, los prototipos completaron cerca de dos años de pruebas dinámicas en vías de Alemania, Austria, Suiza y Países Bajos, abarcando comportamiento, frenado, aerodinámica y compatibilidad electromagnética.
Paralelamente a los proyectos con DB y DSB, Talgo firmó en mayo un contrato con Flix por 2.400 millones de euros para suministrar hasta 65 trenes basados en la misma plataforma, con un pedido firme inicial de 30 unidades valorado en 1.060 millones de euros, confirmando la expansión de la tecnología española en el mercado europeo de alta velocidad ferroviaria.
