Mientras algunos vagones en Chile muestran poemas de Pablo Neruda en su techo y otros sólo se limitan a dar espacios a la publicidad, en el otro extremo del planeta aprovechan el metro para decorarlo con temáticas estacionales.
Así lo hicieron en Busan, la ciudad más grande de Corea del Sur, en donde sus usuarios vuelven a la playa en sus viajes sobre la línea.
Mar, arena, delfines e incluso sandalias, forman parte de la nueva fachada del metro coreano, lugar que actualmente está en verano y que pretende llevar dicha estación a cada rincón del país.
La iniciativa fue pensada en aquellos que aún tienen que trabajar y no se encuentran en período de vacaciones, para hacer de sus viajes una experiencia más amigable.
Cabe señalar que en Corea del Sur se encuentran en verano durante julio y agosto, meses en los que las temperaturas no descienden de los 24º y varían hasta los 27º o más.
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