El Sistema de Transporte Colectivo Metro es uno de los lugares más emblemáticos de la Ciudad de México. En 2015 transportó a 1,623 millones, 828 mil, 642 usuarios.
Para los que lo utilizamos diariamente, encontrarnos en estaciones saturadas se ha convertido en parte de la rutina. Cuando llega el Metro, algunos usuarios desconsiderados suelen empujar a los que esperan al andén para poder ingresar al vagón, sin embargo, con esta actitud el riesgo de caer a las vías es alto.
El atropellamiento por el tren no es el único peligro al que nos enfrentamos en caso de uno de estos accidentes, las vías sobre las que avanza, también pueden ser causa de muerte si las desconocemos.
Los rieles del Metro funcionan mediante tres barras, a continuación te decimos cuáles no debes tocar bajo ningún motivo.
Estas son las tres partes de los rieles del MEtro de la CDMX: Foto: Metro CDMX
La barra de seguridad se encuentra en parte interior de las vías. Funciona en caso de que alguna de las llantas se ponche, en ese caso la parte metálica avanza sobre esta barra e impide que el tren se salga de curso.
La pista de rodamiento es una parte metálica sobre la que avanzan las llantas del tren.
La barra guía es la que se ubica en la parte alta al exterior de cada una de las vías. Si la tocas, le puedes decir adiós a tu vida. Por su estructura corren alrededor de 750 volts de energía eléctrica. Para que te lo imagines, es lo equivalente a siete veces la electricidad que consumes en tu casa.
Destaca que esta barra puede ser alcanzada con tan sólo sentarte sobre el andén (no encontramos una razón real para que alguien lo haga), por lo que debes tener especial precaución con ella.
Te recomendamos que no te acerques a ella. El andén del Metro es un lugar peligroso en el que no debes perder atención a tu entorno en ningún momento.
