05/03/2024: Hace un par de semanas nos llegó a nuestra redacción información acerca de los proyectos que se están llevando adelante entre la Jefatura de Gabinete de ministros y el Ministerio de Economía.
Dentro de los cuales se encuentra la reformulación del puerto de la ciudad de Buenos Aires, los bienes que pertenecen a Fabricaciones Militares, Tandanor y algo que nos toca de lleno que es el proyecto de privatización del Sistema Ferroviario del AMBA. Que significa esto, es simple se venderían las instalaciones (Estaciones Terminales, estaciones, talleres (y sus instalaciones móviles y fijas), traza ferroviaria, los terrenos aledaños que pertenecen a cada línea) y el material rodante.
Ahora bien, como se podría llevar adelante esto en caso que avance el proyecto, como todos sabrán están vigentes la ley 26.352, la cual establece que Trenes Argentinos Infraestructura es la responsable y titular de toda la infraestructura y por otro tenemos sancionada en el año 2015 por unanimidad la ley 27.132; la cual da los lineamientos en forma muy clara para que el estado tome el rol rector de la gestión del mantenimiento y reconstrucción de la infraestructura ferroviaria.
Por estas simples razones cualquier acción que se quiera llevar en ese sentido deberán derogar las citadas leyes, para lo cual se debe recurrir al congreso; pero bien teniendo en cuenta el gobierno actual las modificaciones se podría llevar adelante mediante un DNU, el cual seguramente será cuestionado.
El proyecto que está en estudio tiene como fin privatizar integralmente cada línea ferroviaria por separado, a saber: Línea Sarmiento, Línea Mitre (incluido Tren de la Costa), Línea Roca, Línea San Martín, Línea Urquiza y Líneas Belgrano Sur/Norte; ya que sería más viable para que sea más atractivo para un grupo empresario.
Durante estos días los rumores se orientaban a empresas locales que actualmente operan los servicios ferroviarios podrían estar interesadas; pero la realidad es que este negocio no estaría orientado a un sector empresario que este ligado al sistema ferroviario sino todo lo contrario más ligado al desarrollo inmobiliario ya que si se analiza el mismo se podrá apreciar todo lo que se puede desarrollar a lo largo de 60 km lineales o más de cada línea ferroviaria.
Ante esto los principales inversores que podrían estar interesados son fondos de inversión que estuvieron ligados a embargos realizados hacia nuestro país con bonos en Default, además hay grupos económicos de desarrollos inmobiliarios en nuestro país siendo uno de ellos el que opera los shoppings más relevantes de Argentina, además de estar interesado en el predio que hoy día posee TANDANOR.
De concretarse, estos grupos inversores irán de la mano de algún operador local o internacional, para poder acceder al negocio a lo que uno se pregunta cuando se termine el desarrollo inmobiliario que garantías tiene el gobierno para que el privado no diga que es imposible mantener el sistema porque no es rentable; que acción tomara el mismo al tener muchas opciones y esto derivara en un desmembramiento de las bienes por lo cual no podrá retomar el control de un sistema totalmente diezmado comparándolo al momento de una posible venta.
Por otra parte, cuáles serán los organismos de control (que posean un equipo técnico con experiencia) que tendrían que reformularse para llevar adelante la fiscalización; además como será el proceso de traspaso de los trabajadores ferroviarios (ya que si uno recuerda el proceso que se llevo adelante en los 90´s da mucha incertidumbre), en donde los sindicatos seguramente tendrán un rol más que importante.
No se entiende cual es el modelo que estamos copiando o queriendo copiar ya que no hay ferrocarril de pasajeros con una red compleja y con una capacidad de transporte similar a la nuestra en el mundo que se haya vendido integralmente. En definitiva, uno piensa en la mejora del sistema, pero nunca se piensa en algo que a futuro termine con la destrucción del sistema ferroviario.
Para tomar en cuenta los técnicos del área de jefatura de gabinete o el ministerio de economía, porque pareciera que no están al tanto que urbes tan importantes como Buenos Aires, los servicios ferroviarios son subsidiados ya que se toma en cuenta la rentabilidad social y no la económica; pero fundamentalmente se toma la importancia que tiene “La Movilidad”, la cual repercute directamente en las economías de un país. A modo de consejo tendrían que leer el trabajo que presento en su momento el General de Marchi sobre el “Costo de las Externalidades” (en el Congreso Panamericano de Ferrocarriles, desarrollado en La Habana en el año 1979), el cual se explica con lujo de detalle los beneficios que obtiene un país cuando invierte en un sistema ferroviario; y pasamos un aviso este trabajo fue tomado como base en países como Francia, España y Alemania y los cuales si los comparamos como eran esos mismos ferrocarriles en la década del 70´s y lo que son hoy día en cada uno de esos países, tendrán más que justificativos.
Tenemos que ser claros, si el camino que se toma es este, se deben tener todas las garantías formales para la protección del sistema ferroviario, y deben intervenir a nuestro entender: los municipios; los gobiernos de la ciudad de Buenos Aires y de la provincia de Buenos Aires; los sindicatos y las asociaciones de usuarios los cuales deben ser incluidos como parte activa en el control y seguimiento de la privatización.
Para finalizar estamos frente a una situación muy preocupante que se puede desarrollar en nuestro país, para lo cual el sector ferroviario tiene que estar más unido que nunca, pero no con el espíritu de confrontar sino por el contrario tenemos que brindar alternativas para mejorar y potenciar lo que tenemos sin permitir que nuestro ferrocarril vaya hacia un camino sin retorno.
Fuente: Agencia Rieles
