Un encuentro de sentimientos entre viejas y nuevas generaciones ha dejado el paso del tren por las principales estaciones que están en pie desde hace más de cinco décadas y que cuentan la historia de pueblos que se desarrollaron gracias a la “economía de los rieles”(Foto: SUMINISTRADA ANI/VANGUARDIA LIBERAL )
Hacia las 6 de la tarde de ayer, llegaron a San Rafael de Lebrija los 18 vagones de carga que componen el tren que hace la prueba piloto para verificar el estado de la línea férrea que va desde Santa Marta hasta La Dorada, Caldas.
La emoción de los habitantes se hizo notar, y cada quien grabó, como pudo, el instante que está haciendo historia en el país: la llegada del ferrocarril a las estaciones que, casi dos décadas atrás, le dieron vida a cientos de pueblos cuya economía se movía gracias a este medio de transporte.
La locomotora llegó tras dos días de viaje y casi 500 kilómetros de recorrido, luego de haber pasado por estaciones emblemáticas como las de Aracataca, La Loma, Chiriguaná, Palestina y Gamarra, donde se hizo el enganche de ocho plataformas vacías.
En San Rafael, la esperaba casi todo el pueblo, que se reunió a saludar nuevamente el paso del ferrocarril, en particular don José Estupiñán, un poblador de 71 años, que trabajó casi 25 años haciendo todo tipo de labores sobre la carrilera.
“Yo trabajé casi 25 años, y logré media pensión. Había transporte y toda esa vaina, en el año 91, fracasó y salimos afuera de la empresa. Ya los trenes no funcionaban casi por la madera podrida. Ya casi en el 2000 le metieron traviesa de concreto. Estamos esperando a ver cómo resultan las pruebas para ponerlo a funcionar otra vez, es un hecho. Incluso yo trabajé colocando traviesa de concreto hasta 2004. Se espera que el riel funcione a 75 kilómetros por hora, pasaba a 25 kilómetros por hora. La estación la arreglaron, quedó bonita, quedó buena”.
Cabe indicar que tras el fuerte invierno que azotó al departamento entre 2010 y 2011, casi la totalidad de la carrilera que pasa por San Rafael quedó destruida por cuenta de las inundaciones que se presentaron en el pueblo. Hoy existe gracias al desarrollo de la estación del ferrocarril de San Rafael, donde el tren pernoctó anoche.
Hoy, hacia las 6:30 de la mañana, se espera que el tren retome su recorrido y pase por Barrancabermeja, sobre las 11 de la mañana, hacia su próxima parada, La Grecia.
Las proyecciones arrojan que al año se pueden movilizar 80 millones de toneladas entre Santa Marta y Chiriguaná; y entre La Dorada y Chiriguaná, un millón de toneladas.
El corredor central, divido en dos tramos, está a cargo de la Agencia Nacional de Infraestructura, que tiene concesionada la vía férrea desde Santa Marta hasta Chiriguaná a Ferrocarriles del Norte de Colombia (Fenoco) y que recuperó, mediante un contrato de obra pública, el trayecto que va de Chiriguaná a La Dorada.
Un poco de historia
El ocaso del tren comercial en Colombia se produjo hace más de 16 años, tras el fin de Ferrovías, entidad encargada de mantener el ferrocarril y de administrar la línea férrea.
Entre finales de 1999 y principios de 2000, después los problemas de las empresas de ferrocarriles que existían en su momento, se dio el desafortunado final de este medio de transporte de carga en el tramo La Dorada – Chiriguaná, corredor por el que se vieron circular los últimos trenes comerciales. Hoy sobreviven algunos trenes de pasajeros que conectan a La Grecia con Barrancabermeja y García Cadena.
