Detenida en el tiempo permanece la Estación Central del Ferrocarril «Carlos Antonio López», y con ella el primer tren a vapor de Sudamérica. A través de estas páginas, invitamos a dar un paseo por los andenes del recuerdo.
Postales de antaño que plasman pasillos colmados de pasajeros que iban y venían guiados por las campanadas que anunciaban la salida del tren, dan cuenta de una época floreciente de la estación ferroviaria, que hoy está lejos de ser lo que alguna vez fue, a pesar de que hasta hace poco tiempo mantenía funcionando una de las locomotoras con fines más bien turísticos.
Construida en 1959 por el arquitecto italiano Alejandro Ravizza, con ayuda de ingenieros ingleses, la Estación Central del Ferrocarril fue inaugurada durante la presidencia de Don Carlos Antonio López, el 24 de mayo de 1864.
Ubicada sobre las calles Eligio Ayala y México, en pleno centro capitalino, es considerada, desde 1993, patrimonio histórico de la Nación y uno de los principales atractivos turísticos del país. Efectivamente, a diario recibe la visita de extranjeros, en su mayoría europeos, estudiantes e investigadores paraguayos, interesados en conocer un poco más acerca del primer tren a vapor de Sudamérica.
Dentro del recinto se puede observar a la Orquesta Sinfónica de la Ciudad de Asunción (OSCA) en pleno ensayo, y colindando a la estación, recorrer el Museo Histórico Ferroviario, que documenta la historia de los trenes de Paraguay, a fin de mantener la memoria del medio de transporte que durante años sirvió para que los pueblos y las ciudades del país permanezcan comunicadas.
En el interior del museo, los interesados pueden encontrar desde relojes antiguos, libros de asiento de materiales, accesorios de trenes, faroles, campanas, mapas de lienzo, tableros de las usinas eléctricas, hasta inéditas fotografías.
También destacan los telégrafos para la transmisión de telegramas en las diferentes estaciones, y las fichas de los trabajadores al lado del reloj marcador, que demuestran la prolijidad con la que era manejada la asistencia de los mismos.
Los vagones. Guillermo Soria, encargado del museo, comentó que las dos plataformas en exhibición corresponden al vagón comedor y al presidencial, que tiene un interior lujoso y habitaciones de primera clase, muy similares a las de un hotel.
Sin dudas, el recorrido por las instalaciones es un viaje en el tiempo, un viaje hacia la historia nacional, que evoca con melancolía la travesía en los circuitos ferroviarios, que en la actualidad permanecen desactivados por la reparación de una de sus vías.
Proyecciones. En el marco de los festejos por el Bicentenario Nacional, se prevé la refacción de la estación y la concreción de varios proyectos para reactivar el ferrocarril como atractivo turístico.
Horario de atención y precio de entradas
La Estación Central del Ferrocarril abre sus puertas de lunes a viernes de 7 a 15 horas, y los sábados y domingos de 9 a 13 horas.
Los precios de las entradas son de guaraníes 5.000 para visitantes paraguayos, 10.000 para extranjeros, y 2.000 para niños.
Para más información llamar al teléfono 447848, o bien acceder al sitio web www.ferrocarriles.com.py
Curiosidades
En 1854, fue importada la primera máquina por ingenieros ingleses.
En 1910, fue traído el vagón presidencial para la movilidad de los mandatarios.
En 1992, el vagón presidencial fue utilizado por la Reina Sofía para dar un paseo desde Asunción hasta Luque.
Actualmente, el museo congrega piezas antiguas recuperadas de las 35 estaciones ferroviarias del Paraguay.
Fuente y fotografía: lanacion